@EQUO Aragón apoya #ComerciosVivos

comerciosvivosequoDesde EQUO Aragón consideramos que es necesario un replanteamiento de la forma de consumir por parte de la ciudadania primando el consumo local y de cercanía.

De esta forma se mantiene la economía local,  evitando los grandes desplazamientos en vehículo particular, disminuyendo la contaminación y el primando comercio tradicional.

Por ello apoyamos el manifiesto «Comercios Vivos – En defensa del pequeño comercio. No más grandes superficies en Zaragoza» que reproducimos a continuación  y te instamos a que lo apoyes tu también.

DECLARACIÓN EN APOYO AL COMERCIO LOCAL: POR UNOS BARRIOS VIVOS, NO AL OUT-LET DE PIKOLIN

Próximamente se someterá a votación en el Ayuntamiento de Zaragoza un plan especial que, como lo presenta la propiedad, permitirá implantar en la carretera de Logroño una nueva gran superficie comercial, esta vez destinada a “out-let” o comercio de oportunidad, conocida como Torre Village.

El Plan Especial de Reforma Interior del Área de Intervención H-61-5 de Zaragoza (Pikolín) pretende implantar un cambio de usos que perjudica a la ciudad (1).

Nos hallamos ante un nuevo desarrollo irracional con graves e irreversibles perjuicios para la ciudad y quienes la habitamos.

Por una vez, prevengamos antes de curar y preguntémonos cómo y dónde afectará este macroproyecto si ve la luz con el respaldo de nuestros concejales:

COMERCIO DE PROXIMIDAD.- Aragón acoge la mayor densidad comercial de España, concentrada en la ciudad de Zaragoza. Desde 2009 hasta enero de 2015 han cerrado sus persianas más de 1.390 comercios en la ciudad. A la evidente saturación y a la crisis económica y de consumo se añade la apertura de grandes centros comerciales y cadenas de distribución que han estrangulado al pequeño comercio provocando el cierre de numerosos establecimientos.

BARRIOS TRADICIONALES Y LA CULTURA DE CIUDAD.- Los locales comerciales vacíos de las calles zaragozanas anuncian el declive de los barrios tradicionales y su cesión de protagonismo a favor de la periferia. Nuevas grandes superficies, como la que se pretende implantar, contribuyen a crear desiertos en nuestros vecindarios, donde queremos vivir y relacionarnos con nuestros iguales. Frente a ello algunos pretenden entregarnos a una cultura de consumo irracional, globalizadora y alienante. ¿Serán barrios vivos Delicias o Las Fuentes sin las luces de sus negocios tradicionales? ¿Serán San José o Torrero lugares de encuentro, convivencia y vida sin las tiendas de toda la vida? ¿O los utilizaremos únicamente como meros dormitorios?

MEDIO AMBIENTE Y SOSTENIBILIDAD.- Un modelo de ciudad donde la planificación urbanística carece de coherencia es aquel en el que el automóvil se convierte en instrumento obligado para acceder a centros comerciales alejados decenas de kilómetros de nuestros lugares de residencia, donde los atascos parecen indisolublemente ligados al ocio, donde la huella ecológica no se contempla a la hora de planificar los desarrollos, o donde las emisiones contaminantes a la atmósfera o el cambio climático carecen de relevancia. Frente al modelo de ciudad compacta, sostenible, mediterránea y culta se nos oferta el modelo del monopolio, la uniformidad y la especulación de las grandes superficies.

EMPLEO DE CALIDAD.- El sector del comercio emplea a más de 40.000 personas en Zaragoza. La apertura de más centros comerciales perjudica al empleo neto y precariza las condiciones laborales del sector (más horas de apertura, aumento del índice de temporalidad, crecimiento de los contratos a tiempo parcial, aplicación de convenios que no retribuyen el trabajo en domingos o festivos, etc.). Esto nos espera con las aperturas de Torre Village en Pikolín y Lestonnac en Torrero. Como ejemplo actual, desde la apertura de Puerto Venecia, se han destruido más de 6.500 empleos en el pequeño comercio de Zaragoza, cuando en las estimaciones más optimistas del propio gigante comercial se hablaba de crear 4.000 empleos.

Las organizaciones firmantes exigimos a las y los concejales de Zaragoza que demuestren su compromiso con la ciudad y garanticen una ciudad más amable, sostenible medioambientalmente, con barrios vivos, en el que el comercio de proximidad sea un pilar fundamental de su vertebración, con un empleo de calidad, rechazando la aprobación del Plan Especial de Pikolín que de ser aprobado se convertirá en una losa cuyo peso terminará de aplastar a los comerciantes que han resistido durante estos años la crisis y el desembarco de grandes proyectos empresariales y que degradará nuestra calidad de vida y el futuro de nuestros barrios.